septiembre 10, 2020

 Ese dolor de sacarse las vísceras,  ponerselas en palabras, sacarse las venas y exponerlas, como si no fuera doloroso, como si esto no me partiera los huesos y el alma, cada silencio, cada voto de distancia, como si no me destruyera a patadas las entrañas, esa postura inamovible, inerte, mientras me desbarato de a pedazos entre los ojos hinchados de días y los dedos cortados, no sé qué más rasgarme, para que entienda que lo escogería 100 veces sin importar lo mucho que detesto partes de él,  ojalá eso fuera un mal trago, qué podría hacer sino ahogarme en tanta lágrima, dolor, saliva y sudor de esperar que algo le medio mueva el corazón.