enero 13, 2015

Reincidente

3 de la mañana nuevamente...empecé a hacerme nuditos en las arterias esperando que  colapse lentamente pero nada sucede, una pestaña caída, una mala peli y los ronquidos de mi perra. Cierro los ojos pero siento como todo se revuelve, como si agitaran mis entrañas en una botella de compota, leí mis publicaciones anteriores y allí estaba, de nuevo, al acecho, el odio que sentía, la impotencia y su cara al final de mi guante de boxeo, sacudiendose como una caña al viento y recordé porque decidí cambiar de libro, muchas veces me sentí culpable por eso, por huir, por cerrar mis ojos y apuntarle justo en el pecho, en el orgullo, luego recuerdo las docenas de veces que él me disparó a mi, mis litros de sangre esparcidos en las almohadas de la cama y entonces Antonia me dice al oído: ganaste.. y me señala su corazón palpitante ...