mayo 16, 2005

Carta sobre un Ángel [a mis lectores]

Dicen que un 18 de mayo todo comenzó, se vió un chispazo de luz, seguido por un gran llanto de desgarrante dolor y de repente la tierra vió algo nunca antes imaginado, apareció un pequeñísimo y diminuto ser, era un ángel, que nunca pidió existir pero que fue obligado a dejar su lugar en la mente retorcida de un inventor de curiosidades que vive muy lejos de esta galaxia y de cualquier lugar conocido (en la mente de otro inventor igualmente retorcido que nadie conoce, solo yo). Este 18 de mayo ya hace 21 años que llegó a la tierra, o mejor nació (como dicen los humanos) y yo que lo conocí hace algún tiempo y conozco su historia, la última vez que me lo encontré, puedo decirles que lo note muy triste, decaído y aburrido, su mirada reflejaba la infinita y agobiadora nostalgia que siente su celestial espíritu, por que cuando arribó a este planeta olvidó su naturaleza no humana y perdió sus alas, a demás se está convirtiendo en todo lo que su creador nunca quiso, en lo que todos los de su tipo se transforman al rodearse de humanidad, su vida está condenada, por que al salir de la cabeza de su creador se encontró solo y vulnerable, pero aún peor, por primera vez se encontró desprotegido en la tierra, sin su progenitor y sin sus alas, ahora es un ser manipulador y despiadado, con poca cordura , lleno de temores e inseguridades, ya no es perfecto se equivoca y se arrepiente; pero mis queridos lectores, no se preocupen por su suerte, ya su destino está escrito, muy pronto abandonará la tierra y nuevamente sus alas se desplegaran del rastro que queda de ellas en su espalda; por fin será feliz y podrá volar, podrá conocer el resto de los lugares que solo los de su especie pueden visitar y a los que los humanos tenemos el acceso restringido.
Si por casualidad alguno de ustedes, estimados lectores llegase a conocerlo o lo reconociese en la calle, les imploro que le den de mi parte una razón:
- díganle por favor, que no es que su progenitor se halla olvidado de él, que realmente lo ama y que lo espera con los brazos abiertos, para comenzar juntos el viaje por los lugares más maravillosos y desconocidos que existen , por favor reacuérdenle que debe cuidase la espalda, (por que el rastro de sus las podría lastimarse y en ese caso le tocaría caminar en el viaje) y por último díganle que lo extraño y que nunca olvidaré los momentos felices que compartimos cuando estaba en mi cabeza y era la vocecita que me aconsejaba que hacer, les suplico que le digan que quiero, que necesito regrese y que sea de nuevo mi conciencia.
Gracias