agosto 03, 2010

Me siento a pensar en escribir porque siento la necesidad y porque se me pega la gana, como una manifestación gritona de chicharras revoltosas, las palabras escapan como fluidos que corren por los poros y los orificios de mi cuerpo, y sacan con ellos los más sinceros pensamientos y las entrañas lo que pienso, cada una de las letras me provoca una muerte y una resurrección al mismo tiempo, una manera de decirme a mi misma que puedo exteriorizar lo que sueño y lo que respiro, hacer nacer unicornios y brujas deformes, tridentes y pan al desayuno.
Un costo muy alto para quedarse corto cuando a la hora de dejar de pensar y dedicarse a la acción se refiere.
Y si me lo preguntas, si, fueron unas muy buenas vacaciones!!!