Un día largo este, muy largo, divertido, suspicaz, y bastante nutrido de historias sobre árboles con el señor descortés, vejámenes sexuales, tamaños de aparatos reproductores y mucha cafeína.

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¡Nos timaron! Dice la princesita, lo aborrezco dice la niña, ¡me deprimo!, digo yo…
¡¡Que gente tan enferma y demente hay en el mundo!! Que montón de locos, jugaron con las ilusiones de niñas “indefensas” como nosotras, en el fondo, la maldita de Marta Sambrano tenia razón: “ingenuos”, eso somos, eso hicimos, realizamos una lectura muy ingenua, interpretamos erróneamente las señales y nos dejamos deslumbrar con el dinero y los sueños fáciles…

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Pero que ingenua soy, dejé que jugaran con mis ilusiones,
-pero no es tan grave, al menos no me han timado como a la princesita, Diego no me cabe en una mano y no es tan cretino (es sarcástico pero eso me divierte);
No se si los árboles sienten y tienen memoria, o si dormido y borracho no se vale, lo cierto es que me encantaría ejecutar una venganza bastante respetable, ruin y descarada pero efectiva.

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-Cuídense de mi, no se por que insisten en que soy dulce, soy demasiado vengativa, y que lo digan mis esposas.
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Dos pizzas vegetarianas y dos de carnes, mientras Anais se pone pitillitos por manillas, Aurelia apuñala por la espalda una etiqueta de agua brisa, yo y el señor descortés establecemos nexos y lo siento como el padre que nunca tuve, las montañas tienen eco, ¿sabían? ¿Las montañas? ¡Ves! ahí está el eco, una cascada de risitas, y de nuevo nuestros dientes brillan sobre las pizzas.

En la giralda:

- Ush!! Está rebueno ¿cierto?
- Mmmm…

- El tipo ese, está muy lindo, (alto y delgado, casi tanto como mi algodón, debe tener entre 30 y 40 años, está con el fotógrafo de la chaqueta adidas).

Murmuraba Anais mientras Aurelia descubría que es adicta a la cafeína, al cigarrillo (bueno eso lo sabemos todos), y a otras cositas, como pronunció, mientras la señora recogía las múltiples tazas de café… yo pensaba: ¿qué mal he cometido, para que todo me salga mal?, ¡maldita sea! Muchísimos males, tengo una franquicia del infierno esperándome con una paila de azufre caliente, justicia natural debería decir…

De verdad debo estar muy triste, lo presiento (y eso que tengo una fluxetina en la panza), ¿y yo? ¿A que soy adicta? A muchas cosas ¿no?

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soy un adicto/ soy un adicto a ti/ soy un adicto a ti/...